Saludar a un amigo después mucho tiempo sin comunicarse suele ser motivo de grandes aventuras. Eso fue exactamente lo que me pasó al saludar a un amigo de locas ideas. Por motivos laborales nos encontramos y después de ponernos al tanto de los últimos acontecimientos en nuestras vidas rapidamente surgió la idea de un viaje. Fue una idea espontane que surgió en nuestras mentes deseosas de aventura. Nos pusimos de acuerdo en la fecha, ese mismo fin de semana, pero lo que aun no estaba claro era el destino. La noche antes del viaje elegimos el destino pero a la mañana los planes cambiaron. Como sea tomamos camino y la carretera estaba libre de tráfico para empezar el recorrido desayunamos en un bello restaurante a la orilla de la carretera. Delicioso y suculento. Seguimos el recorrido fotografiando los letreros de bienvenida que en cada pueblo nos recibian. Atravezamos varios y tomamos fotos de algunos de ellos. El camino fue largo, muchos kilometros nos condujeron hasta un bosque de elf
Cada día trae su propia aventura